Servicio del Día del Señor del 14 de enero del 2024

Pastor Sung Hyun Kim

Somos quienes han recibido el amor de Dios. El amor de Dios fue manifestado a través de las obras que Él ha hecho por nosotros. Sin embargo, nosotros solo conocemos una pequeña parte de lo que Dios ha hecho por nosotros con Su amor. Si verdaderamente aceptamos este amor, debemos descubrir en diversos aspectos lo que Dios ha hecho por nosotros y el sacrificio que hizo en el proceso. A través de esto, podemos tener una comprensión más profunda del amor de Dios.

El amor de Dios que fue revelado a través de Cristo es un ámbito que debemos morar. Convertirnos en quienes pertenecen en Cristo, significa que hemos entrado en Su amor. Nosotros al pertenecer en Su amor debemos comprender con detalle hasta qué punto su amor puede alcanzar y como se expresa. Con respecto a esto, Pablo escribió, “Deseo que seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura de amor de Cristo. Para que así, conozcan el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento.”

El conocer el amor de Dios no se limita en el ámbito del conocimiento. El amor es la hermosa experiencia donde la personalidad de Dios y la nuestra se encuentran, dibujando una gran imagen indescriptible en nuestros corazones. Este amor va más allá del entendimiento e imitación de este mundo. Las personas podrán enfatizar la moral y ética en un intento de imitar ese amor, pero el origen del amor de Cristo es diferente a lo que el mundo define como amor. Por lo tanto, si usted es cristiano, no deberá subestimar la importancia del amor. Debemos recordar que conocer el amor es conocer a Cristo, y esto significa conocer a Dios.

Todos los santos en la iglesia juntos deben comprender y conocer la infinidad de ese amor. No existe nadie que puede llegar a entenderlo al estar solo en su cuarto. Al estar en medio de un entorno donde practicamos el mandamiento de amarnos los unos a otros, podremos enfrentar varias dificultades haciendo que nuestro entendimiento de ese amor sea mucho más profundo. Cuando sobrepasamos muchas dificultades y nos esforzamos en amarnos, podemos ver claramente los mecanismos de amor que Dios ha puesto en diversos aspectos de nuestra vida. También llegamos a reconocer que cada una de las cosas que hemos disfrutado, incluso las cosas que parecen ser insignificantes en la iglesia, son un rastro de que Dios ha amado a alguien, y que Su amor ha sido otorgado a nosotros a través de esa persona.

Para los cristianos, el amor no es una opción; es la manera de Dios de preservar a los que han sido salvos. El amor tiene características opuestas al pecado. Por lo tanto, aquellos que se esfuerzan en amar, gradualmente se alejaran de la costumbre pecaminosa. El Señor no solo nos ha salvado legalmente, sino que también nos da un mecanismo de protección para que lleguemos al reino de los cielos, y el entorno de amor en el que estamos ahora es ese mecanismo. El amor del Señor que nos salva del pecado y nos guía al reino eterno sigue operando. Ahora, hagamos que a través de nosotros este amor sea revelado con abundancia.