2019.01.06 – Jesús es Dios

Carta de Simuón

Desde que he nacido en este mundo he recibido un gran regalo de Dios. Este regalo es recibir el nombre de Dios, la cual es “Jesús”. El significado del nombre de Jesús es salvar a su pueblo de sus pecados. Él quien es rey me libera de mi identidad, que era vivir como siervo por toda la eternidad, y me da Su sello. Yo he llevado este sello en mi corazón y he sido marcado por toda la eternidad. Esta marcar es la verdad y se refiere a la libertad. La Biblia nos enseña: “Y conoceréos la verdad, y la verdad os hará libres.” (Juan 8:32). La libertad significa ser emancipado de la esclavitud.

Me convertí en esclavo de mi consciencia y me convertí en un esclavo de la Ley delante de Dios. Por lo cual fui servidumbre por toda la eternidad. Sin embargo, ahora que conozco y creo en el nombre de Jesús, y me he unido con este nombre en mi corazón; ya no soy esclavo de la Ley sino he sido liberado.

Yo soy libre del pecado. Y ya no soy siervo que recibe la presión de los ángeles. Sino siendo sellado por medio del Espíritu Santo de Dios he recibido el espíritu de ser hijo de Dios. Por medio de este espíritu puedo llamar a Dios: “Abba Padre”. ¿Cómo una persona como yo, puede llamar a Dios, Padre? Esta es la gracia de Jesucristo y es el merito que realizo en la cruz. Yo solo depende de la justicia de Jesucristo por toda la eternidad.

Antes de conocer a Jesús, yo será oprimido por mi consciencia como pecador, queriendo morir todos los días. Sin embargo, Dios me guió delante de su presencia. Cuando todavía no podía ver a Dios, hace que pueda ver en el estado que estaba la cual será: esclavo de la Ley. Cuando finalmente conocí el merito de Jesucristo, ese nombre que es Jesús me da la libertad. También ese nombre deja su trasto en mi espíritu por toda la eternidad. Por lo tanto, decidí en llevar esta buena noticia a todo el mundo. Evangelicé diciendo: “Crea en el nombre de Jesús. Conozca el nombre de Jesús. Este nombre significa la libertad. Significa la emancipación. Ese nombre es el mejor regalo para un esclavo.”

En los primero años en mi vida de fe, me decían que era un joven que había recibido un gran gracia parte de Dios. Cada vez que escuchaba estas palabras me sentía feliz. Sin embargo, no entendía esta gracia que me habií dado ni tampoco entendí en que persona me convertía al recibir esta gracia. Por lo que comencé a esforzarme aún más en mi vida en la iglesia, la cual termine teniendo una vida religiosa. Sin embargo, luego de que conocí la verdad, esto es, luego de conocer la “Voluntad de Dios”, entendí que verdaderamente soy un ser libre.

Yo verdaderamente soy una persona libre. Por lo tanto, como en mi interior estoy lleno de la paz, el Espíritu Santo y la libertad, cada semana predico esta libertad. Muchos de las personas todavía no conocen que es la libertad y aún siguen teniendo una vida religiosa. Si no obtiene la libertad es un religioso. El ser religioso es esclavo de la consciencia y la Ley. Este es quien siempre teme a Dios. Yo soy libre con la verdad, y finalmente puedo llamo a Dios “Padre misericordioso”.