Servicio del Día del Señor del 22 de diciembre del 2024
Vive como sabio, cuidando cómo vives
(Efesios 5:15)
Pastor Sung Hyun Kim
La sabiduría del mundo se manifiesta al enfrentar los desafíos cotidianos, como resolver problemas con ingenio, tomar decisiones acertadas o actuar con astucia. Este tipo de persona es vista como sabia según los estándares del mundo. Pero la sabiduría de Dios abarca mucho más que esto. El asunto más importante para el hombre, que ya ha sido destinado la destrucción, es salvar el espíritu, preservarlo y alcanzar finalmente la salvación eterna. Esto puede lograrse a través de la sabiduría de Dios.
Sin embargo, existe un factor que impide que esta sabiduría de Dios sea activada, el pecado. El pecado es completamente opuesto a la sabiduría de Dios. Una persona que vive siendo esclava del pecado, aunque posea la sabiduría de Dios en su interior, no puede activarla, por ende, lleva una vida de necedad. Tal persona minimiza la gravedad del pecado. Incluso mientras persiste en pensamientos y acciones contrarios a Dios, no lo reconoce como pecado. Como tiene una percepción débil sobre Dios, también tiene una percepción débil de la santidad de Dios, lo que inevitablemente debilita su percepción y prevención del pecado.
Lamentablemente, muchos cristianos andan como personas necias. No es que hayan dejado de creer en Dios, sino que sus corazones han sido arrebatados por otros deseos y ambiciones, lo que les impide obedecer completamente a la palabra de Dios. Piensan que son sabios. Pero la sabiduría que valoran pertenece a la vieja vida, y ante los ojos de Dios, es sumamente insensata. Nosotros nos hemos convertido en hijo de Dios. Por lo tanto, debemos confiar plenamente en la palabra de Dios y caminar sabiamente. Andar en necedad no van con los hijos de Dios. Aunque el camino que recorremos sea particularmente difícil, no debemos desanimarnos. Activemos continuamente la sabiduría que Dios nos ha otorgado y enfrentemos este camino con sabiduría.