2017.06.25 – La oración unida de la iglesia
in SermonesLa oración unida de la iglesia
(Hechos 12:1-19)
Dios
Es amor.
Él
Envió al Hijo al mundo
Por su amor hacia el mundo. (Juan 3:16)
Sin embargo,
El mundo murió por el pecado
Por esta razón el Hijo murió en la cruz para rescatarnos. (1 Corintios 1:18)
Además
Dio a conocer el nombre de Dios
Hizo que se postraran delante del nombre de Jesús
Y se presenten ante Dios. (Filipenses 2:10-11)
Quienes reciben el nombre de Jesús (Juan 1:12)
Tiene la autoridad del hijo de Dios
Y puede pedir lo que quiera y cuando quiera
En el nombre de Jesús. (Juan 15:7)
En el mundo hay muchos dioses
Que no son Dios, y no pueden salvar al hombre,
Pero el Verbo que se hizo carne, quien es la Verdad,
Jesús, puede salvar a la humanidad;
Él es verdadero Dios. (Juan 14:13-14)
○ La Iglesia debe confiar en Dios
Con todo el corazón y con toda oración.
Dios es nuestra salvación.
○ La Iglesia no puede olvidar la fe
Y debe confiar en el nombre de Jesús
Dios recibe la gloria.
○ Los que creen en Jesús, que es Dios
Manifiestan las señales en el presente.
Esta es nuestra fe.
※ La Iglesia debe unirse en oración.
El pastor con corazón paciente y de mártir,
Ora, ora y ora.
Hechos 12:1-19
1 En aquel mismo tiempo el rey Herodes echó mano a algunos de la iglesia para maltratarles.
2 Y mató a espada a Jacobo, hermano de Juan.
3 Y viendo que esto había agradado a los judíos, procedió a prender también a Pedro. Eran entonces los días de los panes sin levadura.
4 Y habiéndole tomado preso, le puso en la cárcel, entregándole a cuatro grupos de cuatro soldados cada uno, para que le custodiasen; y se proponía sacarle al pueblo después de la pascua.
5 Así que Pedro estaba custodiado en la cárcel; pero la iglesia hacía sin cesar oración a Dios por él.
6 Y cuando Herodes le iba a sacar, aquella misma noche estaba Pedro durmiendo entre dos soldados, sujeto con dos cadenas, y los guardas delante de la puerta custodiaban la cárcel.
7 Y he aquí que se presentó un ángel del Señor, y una luz resplandeció en la cárcel; y tocando a Pedro en el costado, le despertó, diciendo: Levántate pronto. Y las cadenas se le cayeron de las manos.
8 Le dijo el ángel: Cíñete, y átate las sandalias. Y lo hizo así. Y le dijo: Envuélvete en tu manto, y sígueme.
9 Y saliendo, le seguía; pero no sabía que era verdad lo que hacía el ángel, sino que pensaba que veía una visión.
10 Habiendo pasado la primera y la segunda guardia, llegaron a la puerta de hierro que daba a la ciudad, la cual se les abrió por sí misma; y salidos, pasaron una calle, y luego el ángel se apartó de él.
11 Entonces Pedro, volviendo en sí, dijo: Ahora entiendo verdaderamente que el Señor ha enviado su ángel, y me ha librado de la mano de Herodes, y de todo lo que el pueblo de los judíos esperaba.
12 Y habiendo considerado esto, llegó a casa de María la madre de Juan, el que tenía por sobrenombre Marcos, donde muchos estaban reunidos orando.
13 Cuando llamó Pedro a la puerta del patio, salió a escuchar una muchacha llamada Rode,
14 la cual, cuando reconoció la voz de Pedro, de gozo no abrió la puerta, sino que corriendo adentro, dio la nueva de que Pedro estaba a la puerta.
15 Y ellos le dijeron: Estás loca. Pero ella aseguraba que así era. Entonces ellos decían: !!Es su ángel!
16 Mas Pedro persistía en llamar; y cuando abrieron y le vieron, se quedaron atónitos.
17 Pero él, haciéndoles con la mano señal de que callasen, les contó cómo el Señor le había sacado de la cárcel. Y dijo: Haced saber esto a Jacobo y a los hermanos. Y salió, y se fue a otro lugar.
18 Luego que fue de día, hubo no poco alboroto entre los soldados sobre qué había sido de Pedro.
19 Mas Herodes, habiéndole buscado sin hallarle, después de interrogar a los guardas, ordenó llevarlos a la muerte. Después descendió de Judea a Cesarea y se quedó allí.
Resumen
Amor
Dios es amor. Los bebés quieren de la madre mucho más que alimento. Ellos caen en un sueño profundo en los brazos de la madre. Saben que la madre los ama, y saben que ella cumplirá todo lo que ellos quieran. Para el bebé la apariencia o la edad de su madre no es de importancia. La madre para el bebé es alguien en el cual pueden depender totalmente y esperar su amor. Para nosotros Dios es lo mismo.
Dios es amor. El amor verdadero no cambia. Juan 13:1-2 dice, “Antes de la fiesta de la pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para que pasase de este mundo al Padre, como había amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin. Y cuando cenaba, como el diablo ya había puesto en el corazón de Judas Iscariote, hijo de Simón, que le entregase.” Aunque el diablo puso el pensamiento de vender a Jesús, aun así Jesús amó a Judas hasta el final.
En el proceso de criar a los hijos los padres experimentan muchas dificultades. Aunque sería bueno que los hijos siempre complacieran a los padres, hay ocasiones en que no. Aunque los padres dicen a los hijos, “Los voy a sacar del registro familiar.”, no existe padre que tome esto seriamente. Aunque sea estricto con su hijo, cuando otra persona ofende a su hijo los padres dices, “¿Por qué está insultando a mi hijo? Vaya y crie bien a su hijo”.
Esto es similar a la relación entre profesor y estudiante. En el presente, por algunos de mis discípulos estoy pasando por algunas dificultades. Yo cuando ellos eran niños puse mis manos y los bendije, en la juventud los crie dándoles la Palabra, cuando tenían necesidad les ofrecí una beca y hasta los envié a estudiar en el extranjero. Los pastores de nuestra iglesia al igual que pastores de otras iglesias recibieron este mismo beneficio. Yo los entrené para que fuesen misioneros y les di la unción para ser pastores, también edifiqué los centros de misión los cuales son difíciles de construir y les di un lugar para para su obra. Originalmente pensaba en crear 200 centros de misión y hacer que ellos se encargaran de ello. Yo pensé que ellos iban a cuidar de ellos hasta que el Señor viniera de nuevo. Lo que esperaba era discípulos que estuvieran llenos del Espíritu Santo y humildad.
Sin embargo se levantó una inesperada rebelión. Aún si en una pequeña iglesia una o dos personas traen caos el pastor experimentará dificultades. Pero, ahora en nuestra iglesia está ocurriendo una gran tempestad. Aunque me duele mucho el corazón, hay una cosa que me preocupa. Es el hecho de que ellos están negando a Berea. Como ellos ya han realizado muchas cosas, me preocupa que de ahora en adelante vayan a negar la “Voluntad de Dios”. Esto así, ¿cómo podrán predicar en el futuro? Aunque por algunos meses podrán predicar enfocados en la ética y moral, pero ¿qué será lo que van a predicar después?
Yo hasta ahora he visto a muchas personas quienes habían conocido la “Voluntad de Dios”, pero luego de que negaron la misma han predicado algo diferente. No puedo dejar de sentir lástima por aquellos que dejen aún lado a Berea por emociones humanas. Luego de que probaron el poder que les fue dado de esa forma, ¿cómo podrán llevar su pastoreo más adelante? El lamento en mi corazón por ellos llega hasta el no poder dormir.
Aunque mis discípulos me insulten y me nieguen, yo no los he podido borrar fácilmente de mi corazón. Al pensar en el rostro de cada uno de ellos, me acuerdo de los momentos en que ellos fueron humildes. Sin importar que tanto los hijos caigan, el amarlos hasta el final es el corazón de los padres. Aunque los padres griten diciendo, “Vete de la casa.”, si los hijos no regresan a la casa aunque ya sea tarde ellos están preocupados sin poder dormir.
Jesús nos ama, pero nos ama hasta el final. Por lo cual, señala a Judas Iscariote quien lo iba a vender con tristeza que hubiera sido mejor si no hubiera nacido porque así no hubiera tenido que pasar por aquella circunstancia (Marcos 14:21). De esta manera lo que no cambia en cualquier situación y continua hasta el final, es el amor de Dios.
Un día en la primaria todas las madres tuvieron que visitar el colegio. Algo que descubrí en ese momento es que mi madre a diferencia de las otras era de edad avanzada. Como los otros niños en la clase eran primogénitos, y yo era el quinto de la familia. En comparación con las madres jóvenes, mi madre era de edad avanzada, sin educación académica y de tez morena. Sin embargo, yo nunca he pensado que mi madre es fea. Cuando corría hacia ella me abrazaba, me ponía en sus piernas y yo dormía, ella me amó. Independientemente de que mi madre sea fea o linda no tenía ninguna importancia. Para mí, mi madre era una persona que me amaba. De la misma manera, Dios para nosotros es quien nos ama.
Palabra
Les diré una palabra muy especial para que ustedes puedan obtener coraje en la vida de fe. Para una persona muriendo de sed no importa si toma agua en vasija de barro o de vidrio. Esto es porque lo que se desea es el agua no la vasija. Aunque en sus ojos el pastor pueda verse como un vasija de barro, lo que ustedes necesitan no es la vasija sino el agua que está dentro de ella. Aunque la vasija de barro no tenga mucho que mostrar, no hay la necesidad de que voten el agua que está en ella.
Jesucristo era una persona que no había parecer en él, ni hermosura, y no tenía atractivo para que le deseen (Isaías 53:2). Desde que nació no tenía ningún elemento que los otros hubieran envidiado. Aunque vivió por treinta años en Nazaret, las personas en el pueblo no encontraron algo especial en Él. Hubo ocasiones en la cual Él tuvo hambre, sufrió, y también estuvo desnudo. La razón por la cual los discípulos estuvieron con Él no es porque encontraron algún atractivo humano. Como podemos saber por medio de la confesión de Pedro, “Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.”, el enfoque de los discípulos es la palabra de vida eterna. Así es. Lo que nosotros tenemos que obtener en la iglesia no otra cosa más que la vida eterna.
La Iglesia de Sungrak se ha sacrificado hasta ahora para realizar el movimiento de Berea. Lo que el movimiento de Berea busca es el volver a la palabra. La iglesia de Cristo por mucho tiempo al ser reformado con la corriente del mundo y repetidamente seguir avanzando, termina siendo influenciada por la religión moralista. Como el hijo prodigo que se alejó de la palabra, para que la iglesia de Cristo vuelva otra vez a la palabra el Movimiento de Berea fue levantado. Como Jesús nos llama diciendo, “¡Síganme! ¡Permanezcan en mi palabra! ¡Así serán mis verdaderos discípulos!”, nosotros tenemos que volver.
Jesús dijo, “¿Qué salisteis a ver al desierto? ¿A un hombre cubierto de vestiduras delicadas? He aquí, lo que llevan vestiduras delicadas, en las cosas de los reyes están.” Lo que nosotros estamos buscando no es más que la palabra que salva nuestro espíritu. Por lo cual, realicemos el volver a la palabra. La Iglesia Sungrak es la cuna del movimiento de volver a la palabra. ¿Qué iglesia ha ido por un solo camino aguantando las críticas por cincuenta años? Esto es algo que pueda ser realizado solo con llamado y voluntad. Sin embargo, la Iglesia Sungrak ha seguido hasta este momento. Aunque haya recibido persecución por años no se ha dado por vencida. Y también en adelante seguirá haciéndolo.
En conclusión, la reforma y el “avance” que el mundo está hablando es seguir los deseos de la carne. Por lo tanto, si la iglesia repetidamente es reformada no tendrá más opción que seguir lo secular. En cambio Jesús nos dice que vayamos por el camino estrecho donde no muchos quieren ir. El poner en práctica el volver a la palabra es algo extremadamente difícil de hacer. Personas que han ido con nosotros en este camino por muchos años, al encontrarse en una situación radical dicen, “¡Borremos Berea! ¡Borremos a Simuón quien hizo esto!” Nosotros tenemos que saber claramente sobre la fe que nosotros tenemos.
Dios amó tanto al mundo que envió a su Hijo unigénito (Juan 3:16). El unigénito es el Verbo que se hizo carne. Vuelvo y repito, Dios amó tanto al mundo que da la palabra. Muchas personas cuando de repente consiguen mucho dinero o si algo sale bien dicen, “¡Dios me ama!”. Sin embargo, esto es el tipo de fe que busca la prosperidad. Nuestro propósito esta en obtener la vida eterna. Es entrar en la casa del Padre en los postreros días. Esta es nuestra esperanza.
Si no hubiera existido el cielo, el Espíritu Santo no hubiera morado en nosotros. El Espíritu Santo es el espíritu que Jesús al subir al cielo pidió al Padre que enviara. Jesús dijo, “Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.” (Juan16:7). Como Jesús dijo, el subió al cielo, y también envió al Espíritu Santo. De tal manera amo Dios al mundo que envió a la palabra. Si nosotros somos personas que verdaderamente recibiremos la palabra, la palabra tiene que estar en nosotros, y esa palabra tiene que obrar dentro de nosotros.
El nombre de Jesús
La Palabra (Verbo) estuvo con Dios desde el principio. Y esa Palabra es Dios. Aunque Él haya venido a la tierra su pueblo no lo reconoció. Sin embargo, cualquiera que crea y se una a Su nombre tiene la autoridad de ser hijos de Dios (Juan 1:1-12). En resumen, el nombre de la Palabra es Jesús. Por lo cual el que la Palabra está en nosotros significa que en nosotros está el nombre de Jesús. Por lo tanto, Jesús dijo, “Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.” (Juan 15:7), y también dijo, “Todo lo que ustedes pidan en mí nombre, lo haré.” (Juan 14:13).
El nombre de la Palabra es Jesús. El ángel al manifestarse a José le dijo, “No, temas. Ella fue concebida por el Espíritu Santo. Tendrá a un hijo y su nombre será Jesús.” (Mateo 1:21). La Palabra fue concebida en una mujer y como cualquier otra persona estuvo por 9 meses en el vientre, y luego de que naciera experimentó todas las debilidades que cualquier hombre hubiera tenido. El experimentó ser excluido, también estar sediento y desnudo. También la injusticia de ser acusado como pecador por las personas. Al ser colgado en la cruz experimentó el sufrimiento de ser tratado como un ladrón. Al final Él experimentó la muerte, y fue enterrado en una tumba. El que vino en carne y experimento todo esto es la Palabra, cuyo nombre es Jesús.
El nombre de Jesús es el nombre de Dios. Ese nombre es el nombre dada como herencia al Hijo por el Padre Dios. A pesar de esto, Él que vino a esta tierra con ese nombre recibió todo tipo de desprecio y burla de parte del hombre, y al final murió colgado en la cruz. Juan 1:12 dice, “Mas a todos lo que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.” Hoy en día nosotros al recibir ese nombre recibimos la potestad de ser hechos hijos de Dios. Sin embargo, esto no significa que en esta tierra vamos a vivir una vida plena y con tranquilidad. Por el contrario, las personas que tiene el nombre de Jesús perderán, experimentarán sufrimiento e injusticias.
Algunas personas podrán pensar, “Entonces, ¿cual es el beneficio de creer en el nombre de Jesús?” Para poder obtener la respuesta a esta pregunta tenemos que conocer la oración que Jesús hizo en Getsemaní. Él pidió al Padre Dios de esta forma, “Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros. Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición, para que la Escritura se cumpliese.” (Juan 17:11-12).
Jesús nos da su nombre para que nosotros al estar en esta tierra hasta el día en que Él vuelva de nuevo y nos lleve a la casa del Padre podamos cuidar nuestro espíritu. Hoy en día muchas personas no tiene el interés de cuidar su espíritu, sino que simplemente quieren depender de ese nombre para que la carne vaya bien. Esas personas se quejan diciendo, “Aún creyendo en Jesús el negocio no va bien.”, o “No hay ningún beneficio al ofrendar.” El que Jesús nos dé su nombre no es para que nosotros triunfemos en esta tierra, sino para cuidar de nosotros antes de que el Señor vuelva y nos lleve a la casa del Padre. Cualquier persona que tiene el nombre de Jesús puede experimentar pobreza o ser tentado en esta tierra. Sin embargo, las personas que tienen ese nombre vencerán este mundo, y al final entrarán con Jesús a la casa del Padre. Esta es la promesa contenida en la Biblia.
Oración
La personas que tienen ese nombre pueden arrodillarse a ese nombre y pedir lo que quieran. Alguna persona malinterpretan las palabras oren en el nombre de Jesús, como si luego que pedir todas las cosas que quieran al final debe de decir, “oro en el nombre de Jesús”. Sin embargo, tenemos que saber que en el caso de que si no dice al terminar la oración con “oro en el nombre de Jesús”, pero si respeta el nombre de Jesús y depende de ese nombre, cualquier cosa que pidamos a Dios nos lo dará.
La oración es desafiar lo imposible. Por lo tanto, aún podemos orar por cosas que van más allá del sentido común. Como ya he compartido mi testimonio varias ocasiones, yo en toda mi vida he construido aproximadamente 120 centros de misión y lugares de aprendizaje. Les digo esto no es para jactarme, ni tampoco para tomar las obras de los santos. La razón por la cual digo esto es para enfatizar que aún las cosas que pueden verse como imposibles, con la oración puede llegar a ser realidad.
Aún si una persona con una gran fe no ora, no podrá realizar nada. Santiago 4:2 dice, “No tenéis lo que deseáis, porque no pedís.” No debemos pensar que Jesús nos vaya a forzar en darnos lo que quiere dar. Si nosotros mismos no pedimos no vamos a poder obtener. No importa si seamos ancianos, profesores, o cualquier cargo que recibamos tenemos que orar fervientemente por el poder de realizarlo.
Cuando oramos Dios nos envía los ángeles y nos ayudan. ¿Quienes son los ángeles? Hebreos 1:14 dice, “¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación?” Cuando Pedro se encontraba atrapado en la cárcel, el que lo salvó fue un ángel. Pedro era el obispo de la iglesia en Jerusalén. En la cárcel donde fue atrapado estaba bien asegurada y los soldados guardaban el lugar. En ese momento la iglesia oro fervientemente por Pedro. ¿Qué tan fervientemente orarían toda la iglesia cuando su obispo está a punto de morir? La noche anterior de que su veredicto fuera proclamado, el milagro fue manifestado. A las palabras del ángel, “Levántate” las cadenas en las manos de Pedro fueron soltadas, y al seguir al ángel hacia afuera las puertas de la cárcel fueron abiertas. Pedro salió afuera de la cárcel caminando entre los soldados sin ser visto. Al siguiente día en la cárcel donde Pedro escapó nadie pudo explicar lo ocurrido.
En este momento, la Iglesia Sungrak está pasando por algo similar. Lo que ahora necesitamos es la oración de los miembros de la iglesia. A contrario del pasado debemos orar diez veces más. El prodigio que Pedro experimentó puede ocurrir ahora mismo. Yo hasta ahora he experimentado muchos prodigios. Como ya he testificado anteriormente, he cruzado un rio en donde era imposible por la inundaciones. En ese instante había acabado un avivamiento y tenía que ir rápidamente a Seúl, pero había un rio que llegaba hasta las rodillas que impedía el camino. Como tenía prisa yo cruce con todo lo que tenía. Pero no sé porque las personas que estaban detrás mío no pudieron pasar. El agua les llegaba hasta el pecho. Aunque aún ahora pensando en ello es una situación que no tiene sentido, estos tipos de eventos ocurrieron varias veces.
La razón por la cual nuestra iglesia ha crecido de esta manera no es por el dinero sino por las respuestas a las oraciones. Oremos. Oremos mucho más por la iglesia. Oremos como si tuviéramos un llamado. La oración es la fe de desafiar lo imposible. ¡Usemos la fe! ¡Reciba el poder de Dios! ¡Anhele la ayuda de los ángeles que son enviados por Dios a los que han recibido la salvación!
Carta de Simuón
Pronto
Créditos
Centro Misionero de Traducción Simuón
Resumen: Pastor Ki Taek Lee
Centro Misionero de Traducción Simuón. Departamento de Castellano
Interpretación: Ministro Da Un Chung y Eun Sol Jang
Traducción: Ministro Da Un Chung, Eun Sol Jang y Richard Olivieri