2016.01.17 – a Dios lo que es de Dios
in SermonesA Dios lo que es de Dios
(Mateo 22:15-22)
Dios
Es el Creador.
Él
Es el propietario de todo lo creado: los cielos, la tierra y todas las creaturas. (Hebreos 1:3)
Lo que es de Dios, únicamente es para Él; (Salmos 100:3)
Mientras lo que no le sirve, no tiene relación con Él.
Lo que es para el diablo, fue entregado a él, (Mateo 25:41)
Es decir lo incrédulo, lo desobediente y lo injusto.
Las obras de Dios y del mundo son diferentes.
Las obras de Dios son espirituales y eternas, (Mateo 5:10-12)
Pero las obras del mundo, aunque puedan ser útiles, no son espirituales;
Por esta razón, no pueden recibir como herencia el Reino de Dios. (1 Corintios 15:50)
Lo del César es del César,
Mientras lo de Dios
Debe ser rendido eternamente a Él para que reciba la gloria.
Si fue dicho que debemos amar a Dios en verdad (Mateo 22:37)
Debemos hacerlo perfectamente,
Y si fue dicho que debemos amar al prójimo
Debemos hacerlo perfectamente. (1 Corintios 13:1-13)
Debemos ser fieles al cargo celestial,
Pero también al terrenal.
○ Los que viven por el Espíritu Santo
Hacen su obra.
Debemos ser llenos del Espíritu Santo.
○ Los que viven según la Palabra
Deben ser obedientes según la Palabra.
Debe existir la llenura de la Palabra.
○ Los que viven como justos
Aman a Dios
Y buscan el Reino de Dios y su justicia.
※ Tenemos dos tareas
La tarea del Reino de los Cielos
Y la tarea de cada uno hacia sus hermanos.
(Mateo 22:15-22)
15 Entonces se fueron los fariseos y consultaron cómo sorprenderle en alguna palabra.
16 Y le enviaron los discípulos de ellos con los herodianos, diciendo: Maestro, sabemos que eres amante de la verdad, y que enseñas con verdad el camino de Dios, y que no te cuidas de nadie, porque no miras la apariencia de los hombres.
17 Dinos, pues, qué te parece: ¿Es lícito dar tributo a César, o no?
18 Pero Jesús, conociendo la malicia de ellos, les dijo: ¿Por qué me tentáis, hipócritas?
19 Mostradme la moneda del tributo. Y ellos le presentaron un denario.
20 Entonces les dijo: ¿De quién es esta imagen, y la inscripción?
21 Le dijeron: De César. Y les dijo: Dad, pues, a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios.
22 Oyendo esto, se maravillaron, y dejándole, se fueron.
Resumen
Como somos de Dios, obramos junto con Él
Dios es el creador. Él, por sí mismo y por su Hijo, creo el cielo, la tierra y todo lo que hay dentro de ella. Dios es el dueño de todas las cosas. Cualquier cosa que Él quiere, no hay nada que no se cumpla y si Dios impide cualquier cosa, aunque el hombre se esfuerce para lograrlo no lo podrá hacer.
Para los que no creen en Jesús es fácil rendirse ante el destino. Pero, para los que están dentro de Jesús no existe algo como el destino. Nuestra vida está en las manos de Dios. Somos quienes trabajamos junto con Dios. El trabajo que debemos hacer, no es que culpemos al destino sino que Dios pueda recibir la gloria a través de nosotros. Cuando nosotros, quienes amamos a Dios, nos esforzarnos y complacemos a Dios, Dios al ayudarnos recibirá la gloria por medio de nosotros. Por lo tanto, no podemos darle tregua a Dios.
Lo que es de Dios a Dios y lo que es de César a César
Un fariseo vino a Jesús y pregunto, “¿Es lícito dar tributo a César, o no?”, Jesús le dijo que trajera una moneda y señalando la inscripción de César le respondió, “Dad, pues a Cesar lo que es de Cesar, y a Dios lo que es de Dios.” (Mateo 22:15-22). Por medio de esta palabra el Señor nos está preguntando, “¿Que inscripción tienen ustedes?”. En Génesis 1 nos dice que la humanidad fue creada a imagen y semejanza de Dios. El hombre es un ser que no solo su apariencia fue igual sino que también hasta su espíritu fue hecho según la forma de Cristo. El Señor nos está diciendo a seres como estos que, “Da, a César lo que es de César y a Dios lo que es de Dios.”
Muchas personas hoy en día viven una vida sin poder cumplir el balance que hay entre estas dos cosas. Hay personas que dicen, “Como tengo que servir a Dios no puedo servir a mis padres.” El Señor criticó este tipo de pansamiento (Marcos 7:11). En Efesios 6:2-3 nos dice, “Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.”
No solo es el hecho de que hable sobre la relación entre padre e hijos sino entre esposo y esposa, también la relación entre señor y siervo. En Efesios 5:22 dice, “Las casadas esten sujetas a sus propios maridos, como al Señor”, también en el capitulo 6:5 dice, “Siervos, obedeced a vuestros amos terrenales con temor y temblor, con sencillez de vuestro corazón, como a Cristo.” Con el cuerpo no podemos heredar el Reino de Dios. Sin embargo, eso no significa que tengamos que menospreciar los principios de la carne. Entreguemos lo que es de Dios a Dios y lo que es de Cesar a Cesar, debemos cumplir la palabra del Señor.
También seamos fieles a las riquezas injustas
Jesús nos dijo, “El que es fiel en lo muy poco, también en los más es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, también en lo más es injusto. Pues si en las riquezas injustas no fuisteis fieles, ¿quién os confiara lo verdadero?” (Lucas 16:10-11). Al referirse a las riquezas injustas no quiere decir que sean riquezas robadas, sino las riquezas que no tienen una relación directa con el Reino de los Cielos. El hecho de que las personas manejen las riquezas en este mundo es para que su cuerpo tenga comodidad. Aunque su cuerpo este cómodo por medio de eso no podrá recibir el Reino de los Cielos como si fuera una empresa. Sin embargo, el Señor desea que también seamos fieles a esas cosas, y también desea que hagamos lo mismo por el Reino de los Cielos.
Somos creyentes. Los creyentes son de Dios. Por lo que, debemos someternos a Dios para que seamos usados como Dios quiera. De la misma manera, como miembros de la familia debemos ser fieles a la familia. Si una persona tiene un esposo tiene que ser fiel como esposa y la persona que tiene esposa tiene que ser fiel como esposo. El hijo tiene que ser fiel a sus padres y los padres tiene que ser fieles a los hijos. Debe haber un balance entre la vida delante de Dios y delante de las personas.
Aunque sea creyente no significa que solo puede triunfar cuando rinde culto a Dios, no puede tener una actitud indiferente al vivir en el mundo. Dios no recibe el culto que rendimos en el Día del Señor sino que recibe nuestra vida en sí. Dentro del concepto del culto también nuestra vida en si es agregado. Por lo tanto, debemos esforzarnos para que nuestra vida en sí pueda ser la riqueza que complazca a Dios.
Estamos recibiendo la protección del gobierno y estamos siendo revestidos de los beneficios del gobierno. Por lo tanto, tenemos la obligación hacia el gobierno, debemos amar al gobierno. Las personas que están trabajando deben amar su trabajo y tienen que ser responsables del puesto que se les fue dado. No podemos trabajar a medias por la excusa de que nuestro sueldo es poco. Algunas personas cuando le preguntan, “¿Cómo le ha parecido donde está trabajando ahora?”, ellos responderían, “Solo trabajaré por varios meses y renunciaré”. Ciertamente, Dios esta viendo esas actitudes. No hay forma de triunfar en el trabajo si trabaja a medias por la excusa de que esta recibiendo poco en su salario.
Dios busca a los que son fieles
Cuando era joven trabajé en una granja avícola ajena. Aunque trabaja allí por muchos años no tuve la oportunidad de comer ni un solo huevo. En ocasiones algún huevo se rompía, no había nadie quien me juzgara por comerlo. Sin embargo, cuando yo descubría un huevo roto lo llevaba al dueño y se lo entregaba. Durante mi vida de fe cada vez que recibo la ayuda de Dios yo siempre recuerdo esa etapa. Cuando Natanael le preguntó al Señor, “¿De dónde me conoces?”, el Señor respondió diciendo, “Cuando estabas debajo de la higuera, te vi.” Seguramente, el Señor está viendo cuando era fiel en la casa de otra persona.
Es obvio que los creyentes tienen que hacer las cosas bien a Dios, pero también tienen que serlo con las personas. Hay personas que tienen una ferviente vida de fe y se esfuerzan mucho en su servicio pero no tiene frutos al predicar. Su vida de fe es buena, sin embargo, extrañamente no hay ninguna persona que lo siga para ir a la iglesia. La razón de esto es porque uno tiene que amar a Dios con todo su corazón, con toda su alma, con toda su vida y de la misma forma amar al prójimo, pero en realidad les hace falta el interés y la sinceridad hacia el prójimo.
En los ojos del hombre el Rey Saúl era grande, sin embargo, en los ojos de Dios no lo complació. Dios señalando a David, hijo de Isaí, como él que era conforme al corazón de Dios. ¿Cuándo sería que Dios lo vio? Esto fue cuando estaba cuidando a las ovejas de su padre en la pradera. En el caso de que si un león viniera y tomara uno de las ovejas, David perseguía y mataba al león hasta el final, luego tomaba la oveja que estaba entre los dientes del león y se lo entregaba a su padre. Por lo tanto, Dios tomó como rey a David y salvó a su pueblo de las manos de su enemigo.
Debemos recibir el amor de Dios. Debemos hacer que Dios nos acepte y hacer que nos ayude. Debemos saber entregar lo que es de Dios a Dios y lo que es de Cesar a Cesar. Debemos ser quienes puedan sostener la bendición de Dios.
Pastor Lee Ki Taek
Centro Misionero de Traducción Simuón
Carta de Simuón
Soy un hombre injusto con muchas faltas. Sin embargo, he recibido la gracia de Dios. Aunque sea un pecador ante los ojos de los hombres, he recibido el amor de Dios, porque Él me ha redimido con Su sangre y me ha justificado. Porque así lo creo, vivo de manera honesta conmigo mismo; esto no es hipocresía. Por esta razón, Dios me sostiene, y me utiliza para realizar Su obra y revelar Sus misterios. Me permite respirar mediante el Espíritu Santo y constantemente me llena con su poder. Por ende vivo cada día como un testigo de Jesús.
¿Qué más puedo desear de este mundo, si los días de mi vida en éste son pocos? Solo puedo desear que la verdad florezca, incluso después de mi partida, de las raíces que planté, que es la voluntad de Dios, y dar testimonio hasta el final de los tiempos.
Otros pueden burlarse y ridiculizarme, pero, darán cuentas por sus acciones. Aun así, quiero estar loco por Jesús mi tiempo restante. Creo en Dios y en Su palabra. Creo en el Señor Jesucristo y sus obras meritorias. Creo en el Espíritu Santo y en todas Sus obras poderosas. Ahora, busco su sabiduría y poder, las cuales anhelo poner en práctica y escribir, y por lo tanto llenar los graneros del reino de Dios.
Considerando mi condición física y condición médica, debí haber partido de este mundo hace más de una década. Con ninguna cura disponible en la medicina moderna, he sido clasificado como una persona discapacitada de segundo grado.
Por esto he orado vehementemente a Dios, sin ninguna duda es como el testimonio del apóstol Pablo. Le doy gracias a Dios por la gran y muchas revelaciones e inspiración que he recibido. Mi deseo ardiente es impartirlas todas por escrito, sin embargo, mi carne es débil y me queda muy poco tiempo. Le agradezco a Dios, porque creo que es un aguijón en la carne, un mensajero de Satanás que Él me ha dado para que no me enaltezca. A pesar de esto, simplemente no espero morir como una persona que es inútil porque he sido clasificado con una incapacidad de segundo grado. Por el contrario, obro con más fuerza y haciendo mucho más que aquellos con perfecta salud.
Tengo confianza en el Pastor Sung Hyung Kim, nuestro Obispo. Dios derramó Su Espíritu sobre el temprano en su vida, le dio muchas experiencias en el ministerio, predicando y aprendizaje académico, y le llenó con un gran llamado. Esta obra no es una obra que pueda ser emprendida por cualquiera, sino por aquellos que son escogidos por Dios. Por lo tanto, él no debe ser comparado conmigo, el Obispo mayor. Mi experiencia y conocimiento han sido adquiridos durante un periodo que se extiende por más de 60 años, mientras que el Obispo ahora debe desarrollar su experiencia. Sin embargo, él es un docto entro los lideres de Iglesia Coreanos. Aun más, es veraz, y lleno de inspiración y un gran llamado. Cada uno de nosotros debe orar con más devoción por nuestro Obispo. Esta es mí petición para cada uno de ustedes.
Pastor Ki-Dong Kim
Columna de Adoración del Día del Señor
Créditos
Centro Misionero de Traducción Simuón
Resumen: Pastor Ki Taek Lee
Centro Misionero de Traducción Simuón. Departamento de Castellano
Interpretación: Ministro Da Un Chung y Eun Sol Jang
Traducción: Ministro Da Un Chung, Eun Sol Jang y Richard Olivieri