Servicio del Día del Señor del 9 de junio del 2024
La iglesia que habla la verdad en amor
(Efesios 4:15)
Pastor Sung Hyun Kim
Dios da al pastor a la iglesia como regalo para que los santos sean capacitados, haciendo que sirvan en el ministerio y así edificar el cuerpo de Cristo, que es la iglesia. Dios desea que los santos de la iglesia sean uno en la fe y en el conocimiento del Hijo de Dios, y espera que crezcan espiritualmente. En la iglesia que realiza la voluntad de Dios, los santos no son llevados por doquiera por las artimañas de hombre ni engaños con astucia, en lo contrario, al hablar la verdad en amor, se asemejan a Cristo en todos los aspectos.
El hablar la verdad es el deber que todos los que han sido salvos a través de ella deben hacer. Sin embargo, hay una cosa que debemos tener en mente al hacer esto. Al hablar la verdad, se debe hacer con amor. Muchos tratan la verdad como conocimiento. Ellos afirman que han aprendido la verdad, pero fallan en recibir el amor de Dios; declaran que están hablando la verdad, pero fallan en manifestar el amor de Dios. La verdad y el amor son inseparables. Cuando la verdad es encarnada, es manifestada con una vida llena de amor. En donde la verdad es separa del amor y se considera como conocimiento, el poder de Dios para salva al pecador no puede ser manifestada.
En el caso de que si una persona afirma conocer a Dios, pero al mismo tiempo asegura que el amor no es importante, en realidad esta persona no conoce a Dios. Esto es porque Dios es amor. Este amor que Dios nos ha revelado es un amor que no existe en el mundo. Dios confirma su amor por nosotros al sacrificar Su propio Hijo mientras éramos pecadores. Ahora que hemos vivido por ese amor, debemos compartirlo, esta obra va más allá que simples palabras. Nuestras acciones y vida deben reflejar la naturaleza de Dios, y a través de nosotros las personas deben conocer al Dios de amor.
La iglesia que crece según la voluntad de Dios, tales obras seguirán ocurriendo. Comúnmente, el crecimiento de la iglesia se considera como el incremento de número de miembros. Sin embargo, lo que la Biblia define como el crecimiento de la iglesia no es el crecimiento cuantitativo, sino el crecimiento espiritual. En otras palabras, la iglesia y los santos que componen la iglesia se asemejan a Dios; esta es la clave del crecimiento de la iglesia. El menospreciar el crecimiento espiritual y tener crecimiento cuantitativo puede traer problemas serios en la iglesia. Cuando el número de miembros aumenta, al mismo tiempo aumentara el número de aquellos que todavía siguen los deseos del mundo. Sin el crecimiento interior, aquellas personas pueden contaminar a otros santos, posiblemente pondrán a toda la iglesia en peligro.
La iglesia constantemente debe asemejarse a Cristo. Incluso las personas que estaban acostumbrados a artimañas de hombres y engaños astutos, al venir a la iglesia deben abandonar esto. También la persona que considero la verdad meramente como un conocimiento debe profundizar el entender del amor de Dios a través de su vida en la iglesia y manifestar ese amor a través de su vida. Ahora dejemos de lado el deseo de sobrepasar a las personas con nuestro vasto conocimiento. Ofrezcámonos humildemente para que el amor que Dios nos ha dado brille y sea llevada fielmente a otros. Hablemos la verdad en amor para que las personas puedan conocer al Dios de amor a través de nosotros.