2019.09.29 – Persona del Espíritu Santo
in SermonesPersona del Espíritu Santo
( 1 Juan 3:13-24 )
Dios
es amor.
Él
amo al mundo de tal manera (1 Jn 4:8)
que entrega al Unigénito, quien dio su propia vida.
Este es el amor verdadero. (1 Jn 3:16)
El amor no es solo con palabras. (Stg 2:15-16)
La lengua es mentirosa. (Stg 3:2)
El amor es dar la vida. Esto es la vida. (Jn 6:53)
Dios nos da su propia vida.
Jesucristo es el amor de Dios. (Jn 3:16)
El que testifica y garantiza esto es el Espíritu Santo (1 Cor 1:22)
y mora en nosotros.
Así sabemos que el Señor Jesús permanece en nosotros. (1 Jn 3:24)
Jesús
es el amor de Dios. (Mt 17:5)
El creer en Jesús
es creer en el amor de Dios
y recibir Su amor.
Su amor es Su mandamiento. (Jn 13:34)
Él mora en mi espíritu,
Mi espíritu tiene control de mi alma,
y mi alma tiene control de mi carne.
○ Primero reciba el perdón de pecados
y así salvará a su espíritu.
○ Reciba el Espíritu Santo
y el espíritu no volverá a morir.
○ Si el espíritu va bien, todo el cuerpo será saludable.
Prosperara en todas las cosas.
Y será feliz con el gozo de Dios.
※ Las palabras: solo crea en Jesús, significa
que tenemos que ser limpios de todo pecado.
Significa que tenemos que recibir el Espíritu Santo para vivir.
1 Juan 3:13-14
13 Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os aborrece.
14 Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte.
15 Todo aquel que aborrece a su hermano es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida eterna permanente en él.
16 En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.
17 Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?
18 Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.
19 Y en esto conocemos que somos de la verdad, y aseguraremos nuestros corazones delante de él;
20 pues si nuestro corazón nos reprende, mayor que nuestro corazón es Dios, y él sabe todas las cosas.
21 Amados, si nuestro corazón no nos reprende, confianza tenemos en Dios;
22 y cualquiera cosa que pidiéremos la recibiremos de él, porque guardamos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son agradables delante de él.
23 Y este es su mandamiento: Que creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo, y nos amemos unos a otros como nos lo ha mandado.
24 Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.
Resumen
Carta de Simuon
Nosotros usamos y clamamos el llamado que recibimos de Dios: ‘Volvamos a la Palabra’. Esta es la fe del Movimiento de Berea. Esto viene en escoger entre la persona que ve al espejo con un velo que cubre su rostro o aquel que se ha quitado el velo para ver. La segunda persona podrá ver a Dios directamente.
En el pasado, conocíamos a Dios muy inciertamente. Solo conocíamos sus parábolas y solo veíamos su sombra. Este es el primer pacto. Sin embargo, ahora hemos visto a Dios en persona. Hemos conocido su rostro, hemos escuchado su voz, hemos conocido su naturaleza y su amor. Y da la vida a todos aquellos que confiesan que Él es nuestra vida, Salvador y Dios. Él testifica la vida eterna a través de su resurrección personalmente.
Nosotros al creer en Él, obedecerle, y recibir su gracia recibimos la vida en resurrección y vida eterna. Esto es el evangelio de gracia y verdad. La verdad se refiere a toda la palabra de Dios. Es experimentar hasta la profundidad de Su palabra. La verdad se refiere a la obra, poder, y vida del Dios trinitario – Padre, Hijo y Espíritu Santo. La fe es conocer toda promesa, creación, y juicio de Dios. La verdad es la fe.
La verdad es la palabra que entendemos a través del Espíritu Santo. La Ley no es la palabra espiritual. Es la enseñanza que proclama y regula los deberes de la carne. Por eso no puede salvar al espíritu. Solo a través de la verdad nuestro espíritu puede ser salvo. Por lo tanto, “Conocéis la verdad, y la verdad os hará libres.” (Juan 8:32).
La libertad es la gloria de aquellas personas que participan en la vida eterna con Dios. No existe autoridad en el cielo, en la tierra o debajo de la tierra que pueda apartarnos de esta libertad. A lo contrario, estas autoridades desaparecen espontáneamente en la presencia de la verdad. Antes de que obtuviéramos la fe esto es llamado, evangelio. Luego de que tenemos la fe, llamamos esto como, el conocimiento de la verdad. Antes de que el Espíritu Santo viniera en nosotros, no existía la verdad en este mundo. Sin embargo, cuando viene el Espíritu Santo hace que conozcamos la verdad. Esta es la razón por el cual se le llama, el Espíritu de la Verdad.
‘Volver a la Palabra’ es salir de las enseñanzas religiosas y vida religiosa para que mi espíritu vuelva a la Palabra de Dios. La cual es la verdad. Este es el llamado de Dios para nosotros. El Volver a la Palabra es volver a la Palabra que viene de Dios. Aunque el mundo trate de molestarnos, las personas de la verdad, quienes son ayudados por el Espíritu Santo, son libres por toda la eternidad. De esta manera, yo, Simuon, soy siempre libre. Soy gozoso con el gozo de Dios.
Queridos hermanos de la Iglesia Sungrak y Bereanos en todo alrededor del mundo, todos debemos Volver a la Palabra, aunque esto signifique dar nuestras vidas. Volvamos a la Palabra, Volvamos a la Palabra, ¡Volvamos a la Palabra!
Créditos
Centro Misión Iglesia Sungrak
Resumen: Pastor Ki Taek Lee
Departamento de Castellano
Traducción de sintesis: Eun Sol Jang
Traducción del resumen: Eun Sol Jang
Interpretación: Eun Sol Jang