2019.07.07 – La sangre de Jesús
in SermonesLa sangre de Jesús
( Hebreos 9:11-22 )
Dios
es santo.
El hombre
al desobedecer a Dios, la carne recibe la maldición (Gen 2:16-17)
y su espíritu la muerte. Para salvar el espíritu del hombre,
Dios da su propia sangre como regalo especial. (Hch 20:28)
Esto es la revelación especial. (Jn 6:53-55)
Israel crio ovejas y construyeron el templo
con manos de hombre.
A través del sacerdote quien fue escogido recibieron la redención de pecados.
Esto fue hecho cada año, como una consciencia.
Esto es sombra y parábola de lo verdadero que está en los cielos. (Heb 9:1-10)
La iglesia de Jesucristo,
ha recibido la sangre y riquezas del Hijo de Dios.
Él se ha convertido en el sumo sacerdote a través de su resurrección.
Él ha entrado en el templo que está en los cielos. (Heb 9:24-25)
Esto solo viene de Dios. (Heb 10:5)
¿Por qué nosotros
levantamos nuestras voces y alabamos con gozo?
Los sacrificios que entregamos no son una consciencia,
sino es el sacrificio verdad que está en los cielos.
Este es el sacrificio vivo. (Rom 12:1-2)
◌ Al dar un sacrificio verdadero a través del Espíritu Santo,
recibimos la redención eterna. Hemos sido perfeccionado.
◌ No cambie su fe a una consciencia.
Solo al entregar un sacrificio verdadero con lo espiritual,
será recibido por Dios como un sacrificio vivo.
◌ Nuestra fe es la verdad.
Lo que Dios revelo a través del Hijo es completamente perfecto.
Esto es para salvarnos por la eternidad.
※ Crea en la sangre de Jesús, dependa de ello y cante alabanzas.
Testifiquemos hasta el día que el Señor Jesús vuelva nuevamente.
La sangre de Jesús es vida eterna y poder.
Hebreos 9:11-22
11 Pero estando ya presente Cristo, sumo sacerdote de los bienes venideros, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación,
12 y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención.
13 Porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas a los inmundos, santifican para la purificación de la carne,
14 ¿cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Dios vivo?
15 Así que, por eso es mediador de un nuevo pacto,[a] para que interviniendo muerte para la remisión de las transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna.
16 Porque donde hay testamento,[b] es necesario que intervenga muerte del testador.
17 Porque el testamento con la muerte se confirma; pues no es válido entre tanto que el testador vive.
18 De donde ni aun el primer pacto fue instituido sin sangre.
19 Porque habiendo anunciado Moisés todos los mandamientos de la ley a todo el pueblo, tomó la sangre de los becerros y de los machos cabríos, con agua, lana escarlata e hisopo, y roció el mismo libro y también a todo el pueblo,
20 diciendo: Esta es la sangre del pacto que Dios os ha mandado.
21 Y además de esto, roció también con la sangre el tabernáculo y todos los vasos del ministerio.
22 Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.
Resumen
Carta de Simuon
Cada vez que venimos delante de Dios debemos dar gracias. ¿Cuál es la razón de ello? Cuando venimos delante de Dios no venimos a través del templo construido por hombre o bestias criadas por el hombre, ni por sacerdotes determinados por el hombre. En cambio, nosotros venimos a Dios a través del sumo sacerdote que Dios ha puesto, quien es Jesús. Nosotros dependiendo de su sangre y riquezas que vienen de Dios, entregamos el sacrificio verdadero, la cual es el sacrificio vivo.
El pueblo de Israel sirvió a Dios siguiendo las costumbres por muchos años. Sin embargo, Dios ha abrogado todas estas formas como le servían en la cruz. Hace que nosotros solo le rindamos el culto por el Espíritu Santo. Dios busca a estos servidores.
Existen aquellas personas que, aunque su fe no ha sido recibida por Dios, se alegran y dan gracias. Sus acciones no son diferentes a las del pueblo de Israel, cuando crearon un ídolo en forma de becerro y bailando delante de él en el desierto. Debemos recordar como Dios los destruyo a todos. Cada uno de ellos hicieron todo esto según su determinación y consciencia la cual incluye su convicción. Sin embargo, esto no tiene relación con revelación de Dios. Estos sacrificios que no tienen ninguna relación con Dios, pueden llevar a más pecado.
Jesús para abrogar todas estas tontas tradiciones que teníamos derramo su sangre en la cruz. Nosotros al unirnos con Él a través del bautismo, hemos enterrado todas estas cosas. Sin embargo, estas influencias del pasado aún siguen en nuestro cuerpo haciendo que pequemos. Esto terminará como pecar voluntariamente luego de conocer la Verdad.
Doy gracias a Dios. Doy gracias a Dios porque tengo la fe que he enterrado a mi viejo ser al unirme con Jesús, quien colgó de la cruz. Mis queridos santos he enseñado y escrito a mis discípulos para que sigan la enseñanza correcta. Sin embargo, existen algunos que aun en sus corazones manifiestan su voluntad tratando de venir delante de Dios con sus deseos de la carne. Llevándolos a caer en el engaño y pecar voluntariamente. Una persona que ha recibido la salvación a través de la gracia de Jesús, cae en tentación sus espíritus no solo mueren, sino hacen que otros se unan a sus acciones. Que tan desafortunado es esto.
Dios ha enviado a su Hijo amado al mundo para redimir nuestros pecados. El Hijo no solo es nuestra fe, sino también es el camino de nuestra fe. Cualquiera que conociendo esto lo menosprecia, es abandonar a su propio espíritu. Estas personas aunque sirvan en la iglesia por un largo tiempo no podrán recibir nada.
Queridos hermanos, permanezcan en la Verdad. Solo la Verdad da libertad a nuestro espíritu y nos aleja del camino de la muerte. Solo la fe que pertenece a la Verdad es la fe verdadera. Solo esa fe es la que nos da la vida eterna. Vivamos nuestra vida de fe a través de la fe y el Espíritu Santo que fue dado por Dios. Nosotros somos personas que pertenecemos a la Verdad. Solo las enseñanzas de Jesucristo es la Verdad. Tengamos la vida de fe a través la Verdad. Amén.
Créditos
Centro Misión Iglesia Sungrak
Resumen: Pastor Ki Taek Lee
Departamento de Castellano
Traducción de sintesis: Eun Sol Jang
Traducción del resumen: Eun Sol Jang
Interpretación: Eun Sol Jang